Las redes sociales vienen evolucionando en Internet desde hace décadas pero es desde hace unos diez años cuando comienza a generalizarse su uso. Así, para muchas personas estos medios se han convertido en su vía habitual de relación, de entretenimiento e incluso de información. De esta forma, plataformas como Facebook, Instagram, Twitter y mensajerías con capacidades de crear grupos, adquieren un protagonismo estratégico en nuestras vidas cotidianas. Sin embargo, desenvolverse de forma que estas herramientas comunicativas nos sirvan a nosotros y no al revés, no es tan sencillo. A pesar de la gran utilidad práctica que tienen las diferentes plataformas, también aportan ciertos problemas y complejidades en su uso. Hay aspectos en los que utilizar las redes sociales nos aporta un gran valor, por la capacidad de agrupar personas con afinidades muy particulares, por aportar una gran flexibilidad a la ciudadanía para comunicar e informar de cuestiones que no tratan los medios de comunicación, etc. Pero muchas de estas ventajas, a veces se convierten en un problema cuando se utilizan con fines amorales. Y luego otras cuestiones, desde la privacidad, el uso comercial no deseado, la circulación de información falsa, etc., son cuestiones que pueden reducir la utilidad de estas. De todas estas cuestiones hablaremos con Carlos Carbellido, un profesional de la comunicación y el marketing que ha evolucionado profesionalmente con las mismas redes sociales y es un profundo conocedor de las mismas.
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